Monday, January 30, 2006

Sol de mis días

Sol de mis días Eres un sol, por eso extraño que alumbres mis días.
Eres un sol, y desde que te has ido me he quedado en penumbra.
Eres un sol, y yo de estar contigo no me canso ni me quemo.

Eres un sol, que abrasa y me llena de cálido cariño.
Eres un sol, que alumbra pero no deslumbra.
Eres un sol, que me ilumina el camino de la vida.

Eres un sol, que mañana a mañana se cuela por mi ventana.
Eres un sol, que rayito a rayito calienta mi corazón.
Eres un sol, que no se arredra ante días nublados.

Pero hace días que no brillas para mí, hace días que te has alejado, hace días que me has dejado sumida en la penumbra y yo extraño amanecer con tu caricia en mi piel.
Extraño tu calor, extraño tu luz, extraño tus rayos que solían abrazarme cuando más frío estaba mi corazón.

Es invierno y mi sol se ha escondido entre la nieve, el frío, y los árboles desnudos, y yo no le encuentro, y tirito al sentir cómo mi cuerpo va perdiendo el calor, y te llamo con desesperación, pero tú, mi sol, no apareces... te has fugado con el viento y la noche, me has abandonado.

Sol de mis días, sólo te pido que vuelvas a brillar para mi corazón.

Thursday, January 19, 2006

Pensamientos que duelen

Heartache Te pienso y me duele el corazón, y no es agradable, porque te pienso todo el día, todos los días, y me dueles todo el día, todos los días.
Te siento cada vez más lejos, te lo advertí, cada vez sería más remota la posibilidad de encontrarnos, y heme aquí, con la angustia de no saber si me extrañas, si me quieres, si puedo buscarte… Me lo has dejado claro, no te sientes preparado para volvernos a encontrar, y yo lo confieso, tampoco me sentía bien al principio, pero ahora muero por volverme a perder entre tus brazos.
Pero, desafortunadamente no puedo hacer nada, ahora todo está en tus manos, todo depende de ti, no debo comunicarme contigo… en eso quedamos, pero me consumo por dentro a cada instante pensando en que mi sitio es a tu lado, y me lleno de tristeza cuando compruebo que en parte si nos hemos alejado ha sido por mi culpa… qué digo en parte, todo ha sido mi culpa, por no ser lo suficientemente fuerte para estar unos días sin ti.
Y ahora me asalta la duda de si alguna vez me quisiste, si alguna vez signifiqué algo en tu vida, y no hallo respuesta alguna, el destino se ha propuesto separarnos y lo ha logrado, no sin ayuda, y quién lo ha ayudado, sólo yo.
Perdóname amor, si en algún momento me convertí en una carga o en un problema para ti, si supieras que lo único que deseo es volver a estar entre tus brazos, pero parece que tus deseos y los míos, por esta ocasión no van en el mismo sentido.
Ahora me despido, trataré de desterrarte de mi corazón, aunque visto lo visto, es muy difícil, casi imposible, porque al amarnos ha quedado una huella indeleble en mi corazón.

Monday, January 16, 2006

Al amante sin rostro

Una frase me hizo pensar, alguien dijo: “cuando ames, no hay que ponerle rostro, sino sólo seguir amando”. Pero yo siempre he pensado que es imposible amar lo que no se conoce.
El amor como tal, el amor a todo y a todos es posible concebirlo sin rostro, pero no aquel amor que anhelamos, aquel que deseamos tener para compartir con alguien más.
Para una persona que anhela en la vida formar una familia y unirse en matrimonio, lo más excelso es poder regalar su amor a otra persona, a un esposo o esposa que no es nuestra otra mitad, sino que nos complementa como seres completos que somos, que nos permite expresarnos como somos, que nos conoce y aprecia tanto las virtudes como los defectos que tenemos, porque sabe que de esa mezcla única sale lo que somos como individuos.
Al amante sin rostro, al que le dedico todas mis coplas y mis letras sólo le puedo decir que no me queda mucha más paciencia para aguardar a que por fin devele su rostro, porque me siento maniatada sabiendo que hay por ahí una persona que desea y merece todo lo que estoy dispuesta a entregar, y que mi torpeza o mi ceguera me impidan verlo.
Lo que yo deseo es sentirme plena y compartir mi plenitud con otra persona que se sienta igual de plena. He comprendido a través de los años que no necesito vaciarme de mí para llenarme de alguien más… he comprendido que amar es sólo entregar, entregarse, hacer una donación de sí mismo, y lo más importante, sin esperar una recompensa a cambio.
Pero el hecho de que lo comprenda, no quiere decir que hasta ahora lo haya podido hacer, hay que ejercitarse en el amor, convertirlo en una práctica diaria, el amor se manifiesta en las cosas pequeñas de la vida, en los detalles que la hacen más llevadera.
Pero el amor que nos permite trascender a través de los hijos y de la familia, todavía me es extraño y desconocido, ¿llegará algún día a mi vida en el que pueda vivir este tipo de amor? Espero de corazón que así sea.

Saturday, January 07, 2006

Escribir sobre ti


Escribir sobre ti es muy difícil, porque al pensarte me abruman diversos sentimientos, empiezo por el amor, le sigo con la amistad, también se cuelan dentro de mí la pasión y el deseo.

¿Qué es lo que provoca que todo esto me sepa tan mal? Muy probablemente la certeza de que pensarte no te hace mío, y que además por más vueltas que dé el sol alrededor de su eje, esto no podrá cambiar, porque simplemente no estamos hechos para amarnos.

Cierto es que habrá alguien a quien sí pueda entregarle todo el amor que abriga mi corazón, pero mientras eso sucede, yo me consumo por el deseo de entregar todo lo que siento, todo lo que tengo y todo lo que soy, y me vuelvo ceniza al no encontrar en quien depositar todo este tesoro que albergo en mí.

A veces pienso que la vida es injusta, que la espera es mucha y que jamás seré capaz de encontrar un digno depositario de mi amor, pero a la vez me doy cuenta de que si no lo he encontrado es tal vez porque aunque arda en deseos de amar no estoy lista para amar.

Cuesta saberse un ser hecho por amor que es incapaz de dar amor, y me molesta pensar que a veces he dejado pasar la oportunidad de amar, por estar papaloteando y mirando a las estrellas en lugar de mirar hacia las personas que me rodean.

Pero ¿quién tiene la culpa de que yo sea una soñadora? ¿de que mis ojos vuelen con los pájaros y las nubes y obvien lo que hay a su nivel? La respuesta está en mí... o mejor dicho, la respuesta soy yo. Yo misma me he permitido ir demasiado lejos en mis ensoñaciones (por algo me he autonombrado "La Poeta del Ensueño") y he dejado pasar de largo mil y un momentos por no vivir del presente.

Y a ti, a quien escribo, a quien digo amar, ténme paciencia porque si bien es cierto que lo nuestro como pareja no podrá ser, también es cierto que además de amor, soy capaz de brindar amistad, y una amistad sincera, sin dobleces, con la disposición de dar y de querer sin condiciones...

Gracias por estar ahí cuando te he necesitado, gracias por escucharme y entenderme, gracias por darme un poco de ti en cada charla, en suma gracias por quien me permites ser cuando estoy contigo.